Origen, evolución y filogenia.
Debido
a los avances en la investigación genómica, se produjo una revolución en la secuenciación y
a raíz de técnicas para el análisis del ADN se ha construido el árbol genealógico de los
félidos, partiendo del hecho de que todos los felinos actuales descienden de un
depredador similar a la pantera, el cual rondaba por el sudeste asiático hace
10,8 millones de años, luego se procedió a la determinación de las
ramificaciones del árbol, las cuales se determinaron después de realizar una
comparación de la secuencia del ADN de 30 genes en las especies de felinos que
existen actualmente y el momento en el cual divergieron las diferentes especies
unas de otras, esto se logró gracias al método del reloj molecular (este método tiene en cuenta la magnitud de
las diferencias genéticas entre especies para saber la época en la cual se
generó la separación de las mismas); ahora bien, la recreación de la cronología
de las bifurcaciones se dio a partir del registro fósil. El producto de esta investigación no solo
permitió comprender cuándo los felinos depredadores se radicaron en todos los
continentes sino también sus rutas migratorias y adicionalmente le dio lugar a
la manifestación de la primera información fiable sobre el vínculo entre los
felinos sin importar su tamaño
tamaño
Esta comparación entre las secuencias
genéticas permitió que se estableciera el orden de aparición, y además que se
pudiera hacer una identificación de los linajes, los cuales se dividen en ocho
grupos que han sido definidos, además del análisis molecular, por
características morfológicas, biológicas y fisiológicas propias del mismo
linaje, un claro ejemplo de esto se encuentra en linaje de los felinos de gran
tamaño, los rugientes (el rugir es un ejemplo de una característica propia de
este linaje), este es el género Panthera, en él se encuentran el león, tigre, leopardo,
jaguar y leopardo de las nieves, estos animales tienen la capacidad de rugir
debido a que la osificación del hioides (el hueso que
sostiene a la lengua) es incompleta, sin embargo en a este grupo también
pertenecen felinos de tamaño medio con una estructura en el cuello un tanto
diferente motivo por el cual tienen un impedimento para rugir, estos son la pantera nebulosa y la pantera nebulosa de Borneo.
Para complementar la hipótesis y así
entender el lugar de origen de los felinos y comprender el motivo y la forma en
la que se llegó a la distribución actual de los mismos es importante tener en
cuenta lo siguiente, primero es establecer la distribución vigente de cada una
de las especies de felinos, adicionalmente determinar la o las zonas en las que
usualmente vivían sus ascendencias según lo indicado en el registro
paleontológico; segundo se deriva de la geología, con lo cual se
tuvo en cuenta el descenso y el ascenso del nivel del mar, desde el momento tal
en el que se empezaron a formar los primeros sedimentos; de esta manera se
determinó que cuando el nivel del mar bajaba los continentes se interconectaban
mediante puentes de tierra lo cual le daba paso a los mamíferos para emigrar a
diferentes regiones, sin embargo una vez el nivel del mar volvía a subir los
animales quedaban aislados nuevamente en los ahora continentes; la
incomunicación de estos animales en ínsulas y continentes permitió que se
crearan condiciones necesarias para su adaptación, por ende la constitución
genética varió a tal grado en el que no permitió a las diferentes especies
cruzarse con los descendientes sincrónicos de las primeras generaciones, es
decir, se presentó un apartamiento reproductor que en la actualidad es el
índice para el proceso de especiación.
Dicho lo anterior, el estudio se remonta
a nueve o veinte millones de años en donde se encuentra al último antepasado
común que tienen los felinos actuales, el Pseudaelurus, aunque este
no fue el primer felino, pues los dientes de sable o Nimrávidos tuvieron
lugar hace treinta y cinco millones de años atrás, sin embargo todos los
descendientes de estos se extinguieron con el paso del tiempo; es por esto que
las investigaciones moleculares indican que los felinos contemporáneos
descienden de una de las especies de Pseudaelurus que crecieron en Asia hace aproximadamente once millones de años; no
obstante no se tiene información exacta sobre la especie a la que pertenecía
este felino, aun así se cree que este incumbía al grupo de antepasados
precursores de las 37 especies de félidos que hoy en día existen.
Comentarios
Publicar un comentario